hola!! bienvenidos

lunes, julio 9

Sueños en el Destino. cap. 2


Capitulo 2


-Ahí hay un lugar. Estaciónate
Ya voy, la próxima tu manejas!- se sentía algo frustrada y nerviosa a la vez, lo más raro es que no tenía idea del por qué.
-Está bien, ¡quieres calmarte! Yanne, no es una entrevista de trabajo ni mucho menos, no importa si nos retrasamos unos minutos.
-¡Unos minutos!- realmente se estaba poniendo furiosa- no entiendes que ya casi son veinte minutos y es ¡tu culpa!
-Mi culpa. No, es culpa del trafico, ¡no mía!
-Sabes que no estoy de humor ya bájate del auto.
Salieron y ambas tomaron aire y comprendieron que las dos tenían nervios así que sin decir nada más se dirigieron a la entrada del café.
Al abrir se dio cuenta de que nada había cambiado desde la última vez que estuvieron aquí. Al voltear a la izquierda vio a un muchacho no muy alto pero algo fornido de cabello rizado que en la tenue luz se podía ver que era café y, estaba fumando un cigarrillo. Era Luca sentado en nuestra mesa de siempre pero no había rastro de Sebas. Se quedaron paradas observando todo a su alrededor de repente algo le llamo la atención, un muchacho alto, delgado no muy fornido de cabello negro y liso, no demasiado corto, le cubría las orejas nada mas, su piel era de un tono no muy claro. Y venia hacia ellas con un par de vasos que podrían traer vodka, en algún punto pudo observar que sus ojos eran de color verde agua. Se puso nerviosa y se le revolvió el estomago. Cuando estaba lo bastante cerca para saludarlas, se dio cuenta que ese chico que le había llamado la atención era Sebas.
Eso no podía ser posible, como era posible que le llamara la atención, era ilógico. “Fue efecto de la luz tenue, si eso es.” Se dijo así misma
-Hola chicas- dijo con una sonrisa graciosa y coqueta (como siempre) y las saludo de beso.
-Hola ¿qué es eso?– dijo Lina señalando el vaso, tratando de parecer interesada, para que Yanne no hiciera algún comentario sobre el supuesto amor que le tiene el por ella.
-Ho...ola.- Yanne tartamudeo sin mirarlo a la cara todavía no podía creer lo que hace pocos segundos había pensado.
-Bueno, Luca nos está esperando, vamos- dijo haciéndose a un lado para que fuéramos por delante.


-Hola chicas ¿Como están?- dijo Luca saludándolas de beso.
-¡Hola Luca, muy bien! Y ¿tu?- dijo Lina, que al parecer ya estaba más tranquila a comparación de Yanne que estaba más nerviosa aun.
- ¡Hola Luca! ¿Qué tal? ¿Me prestas…?- dijo Yanne señalando el cigarrillo.
-Amm claro- contesto pasándoselo.
-Gracias.- lo agarro sentándose enfrente de Sebas a lado de la ventana.
Mientras fumaba se quedo viendo hacia la calle, tenía que controlarse, solo fue un accidente además no significaba  nada, ¿por qué hacia tanto alboroto por algo tan insignificante? Sebas siempre fue guapo, no tanto como Luca, pero eso siempre lo supo, entonces ¿por qué se alarma ahora?
Tenía que dejar pasar eso y dejar de tomarle tanta importancia, no es nada importante, ni de qué preocuparse, así que tenía que olvidarlo. Respiro profundo mientras apagaba lo que quedaba del cigarrillo en el cenicero, pensando “no lo evites porque si no, le vas a dar mucha importancia, es guapo lo sabes, ¿te interesa? No realmente así que ya no paso nada…”
-Yanne, Yanne, ¡Yani!- dijo Sebas lo que causo en ella una especie de escalofrió.
-¡QUE!-dijo regresando a la realidad, algo frustrada ya que odiaba que la sacaran de sus pensamientos pero claro eso ya lo sabían ellos.
-Solo preguntaba que como te ha ido.- respondió Sebas con una sonrisa tan encantadora que a Yanne le dieron ganas de golpearlo.
Eso era, regreso la sensación que siempre sentía, todo estaba como antes, todo era casi igual.
-¡oh! Bien realmente, doy clases de baile en Perl’s una escuela privada especializada, la abrió una maestra que tuve y me invito a trabajar ahí y como toda institución necesitan un psicólogo le hable de Lina y le pareció una gran idea. Desde entonces trabajamos juntas.
-Así es, es un buen trabajo en verdad que lo es. Pocas horas y buena paga, que más podía pedir. Pero díganos ¿qué hay de ustedes chicos?-pregunto Lina con algo de curiosidad.

Ambos se miraron a los ojos y fue Luca quien contesto:
-Por eso las queríamos ver. Resulta que en quinto semestre de arquitectura un profesor nos pidió ayuda con un trabajo que tenia con un gran empresario, el señor Foster. Hace unos meses no lo encontramos y nos pidió nuestro teléfono, ya que le había gustado nuestro trabajo y dijo que tenía un proyecto en mente y quería que participáramos. Un par de semanas después nos llamo, dijo que le interesaba hacer negocios con nosotros pero solo si teníamos una empresa. Y como no la tenemos nos quedamos de ver para arreglar eso, en verdad quiere trabajar con nosotros, como sea. Estuvimos hablando y pondremos un pequeño despacho nosotros dos y el señor Foster será nuestro patrocinador.
-¡Felicidades!- dijo Yanne mientras encendía otro cigarro.
-Señor podría traernos un par de Daiquirí  para las señoritas por favor. Dijo Sebas señalándolas a ellas.
-Que sea solo uno y un Negroni  por favor.- lo interrumpió Yanne antes de que se fuera el mesero.
-Bueno ya como sea, ¿Qué tiene que ver esto con nosotras? – esta vez fue Lina quien hablo, estaba algo impaciente.
Sebas continúo:
-Lo que pasa es que necesitamos por requerimiento a una recepcionista y pensamos en ustedes dos, ya que Yanne es muy buena negociando y con la publicidad y tu Lina eres psicóloga y buena para convencer a las personas. Se nos ocurrió que ambas podían hacer el trabajo y así es menos tiempo para cada una.
-Estás diciendo que Yanne y yo trabajemos para ustedes de recepcionistas medio tiempo cada una.-dijo mientras le daba un sorbo a su bebida.
-Más bien que se repartirían el trabajo, me refiero a que Yanne sería nuestra recepcionista y tu solo vagarías por ahí mientras hay algo que hacer.
-Me convenciste en verdad lo hiciste, acepto. Y ¿nos van a pagar bien? Por cierto  ¿Dónde está el edificio?-pregunto casi sin respirar, realmente estaba emocionada.
No es que Lina sea floja solo que siempre quiso trabajar con sus amigos y que mejor si no hace mucho esfuerzo, además odiaba trabajar con niños aunque nunca se lo ha querido decir a Yanne.

-Sí, les pagaremos bien y el edificio está en la ciudad. Pero, enfrente hay unos departamentos en venta, el señor Foster conoce al dueño y nos haría un gran descuento para dos departamentos, todavía no sabemos cuáles, porque queríamos hablar primero con ustedes. ¿Qué dicen?-dijo Sebas mientras miraba a Yanne quien estaba solo escuchando mientras miraba su vaso medio vacío.

Fue entonces que voltio hacia ellos y dijo:
-Pues vayamos a verlos antes de que se venza mi contrato.-todos se alegraron al ver que la habían convencido.

Al terminar la velada salieron para irse cada quien a sus casa, Lucas y Sebas habían llegado en taxi y Lina se ofreció para llevarlos a ambos pero solo Lucas acepto, ya que quedaba de pasada, aunque el carro era de Yanne ella prefirió compartir el taxi con Sebas que ir con Lina y sus comentarios acerca del supuesto amor que le tiene Lucas a ella. No es que no le agradara, si no que son amigos y ambos no pueden mantener una relación, por lo que serian un desastre juntos sin contar que solo se quieren como amigos. Por lo que Lina tendrá que ir por ella, así que tiene otro punto a su favor.

-Bueno chicos nos vamos, nos vemos mañana.-se despidió Lina y después subió al carro.
-Bye chicos nos vemos.-dijo Lucas antes de subirse.
-¡Adiós! Y Lina por favor no llegues tarde mañana.-exclamo Yanne con esperanza de que le hiciera caso.
-Adiós. Sabes que llegara tarde ¿verdad?-le pregunto Sebas a ella con su típica sonrisa.
-Si lo sé, solo espero que no sea demasiado.- suspiro sin más que decir.
-Mira, ahí viene un taxi vamos.- Dijo el mientras le hacía señas al taxi para que parara.

No hay comentarios:

Publicar un comentario